EL Gran Cañón del Colorado es uno de los lugares más asombrosos de la Tierra, pero desplazarnos hasta allí (a pesar que lo recomiendo fervorosamente) puede resultarnos pesado y caro como para justificar solo la visita a esta maravilla de la naturaleza.

Por esta razón, desde el blog de Fernando Vega me gustaría indicaros todos los planes y actividades que puedes realizar por allí y con las que sin duda no te arrepentirás del viaje.

 

Qué ver junto al Cañón del Colorado

 

Pese a que a todos nos viene la imagen de acantilados y desfiladeros serpenteantes, y abruptas cavidades entre tierras de color rojizo, el Gran Cañón no es un lugar que sea visitable desde un mismo rincón: son nada más y nada menos que 446 kilómetros de garganta de las cuales, aunque existen ciertos “must”, es imposible elegir un solo rincón como el lugar al que desplazarse.

Por ello, las excursiones y los lugares que se recomiendan son varios y distan entre ellos varios kilómetros que tenemos que tener en cuenta para poder abarcar el mayor espacio visitable de esta espectacular garganta.

South Rim (borde sur)

Es la entrada del Parque Nacional por su cara sur, junto a la población de Tusayán y el aeropuerto desde el que llegan pequeños vuelos nacionales y salen las avionetas, helicópteros, y otros aviones que ofertan excursiones.

También desde aquí salen los autobuses que recorren esta cara del parque, donde entre otros atractivos nos llevarán a los miradores de la Hermit Road y la Desert View Drive (muy recomendables también si hacemos la ruta en coche).

Otros de los páramos imperdibles en esta ruta son:

  • Mather Point: mirador que supone el primer contacto de impresión con el Cañón desde Tusayán.
  • Museo Geológico Yavapai: con información de interés y vistas panorámicas desde el interior del edificio.
  • Pipe Creek Vista: otro de los miradores imperdibles entre el sendero Rim, perfectamente acomodado y pavimentado.
  • Presa Hoover: una espectacular construcción que forma parte del registro nacional de lugares históricos.

 

North Rim (borde norte)

La cara norte del Parque Nacional tiene como principal atractivo frente a la sur ser menos transitada y, con ello, resultar más tranquila que la cara sur, pudiéndonos evitar las típicas aglomeraciones que nos estropean las fotografías en cada mirador.

Se tarda todo un día en completar el recorrido, que es de trazado lineal (lo cual supone hacer y deshacer camino, recomendable solo si lo hacemos en coche) y tiene como principales atractivos:

  • Point Imperial: es el punto más alto de este recorrido y, como tal, ofrece paisajes “a vista de pájaro” espectaculares
  • Puente Navajo: dos puentes de estructura metálica que discurren en paralelo a 142 metros de altura.
  • Horseshoe bend: la “curva de la herradura”, un meandro del río Colorado situado bajo el lago Powell (segundo embalse artificial más grande de Estados Unidos)

 

Fernando Vega recomienda encarecidamente visitar el Cañón desde varios puntos

West Rim (borde oeste)

Se trata de la cara más explotada y concurrida del Parque Nacional, donde se concentran la gran mayoría de excursiones organizadas.

La razón es que da una muestra de lo que es el Parque en tan solo un día de recorrido, lo cual lo hace muy accesible a los excursionistas provenientes de la “cercana” Las Vegas.

Éste, que es su mayor reclamo, también se convierte en su mayor inconveniente, ya que no supone una ruta muy completa y solo nos resulta útil para tener una mínima apreciación de lo que es el Cañón.

No obstante, es en esta ruta donde encontramos uno de los máximos atractivos del Cañón, el “skywalk”: un sendero – mirador de cristal no apto para personas con vértigo. También, al estar gestionada por una reserva india, encontramos tematizada la visita acorde a esta cultura aborigen.

 

Cómo aprovechar al máximo una visita al Cañón del Colorado

 

Insisto: aunque su sola visita ya justifica el desplazamiento, lo suyo es integrarla dentro de cualquier otra ruta por el oeste de EE.UU (o un coast to coast), entre las que podemos realizar excursiones a otros lugares algo más lejanos (pero accesibles):

 

Las Vegas

 

Es la ciudad-base de la que parten la gran mayoría de las excursiones y los desplazamientos hacia el Gran Cañón. La “Ciudad del Pecado” no necesita presentación: la hemos visto reproducida en miles de películas y series, y su famoso letrero es objeto de camisetas, souvenirs y parte del imaginero popular.

No debemos creer que es una ciudad únicamente para amantes de los casinos y juegos de azar: pese a que no podemos quitar el halo de parque temático, encontramos notables espectáculos teatrales, circenses y conciertos de populares estrellas de forma permanente que la hacen accesible a todos los públicos y a todos los gustos culturales.

El Parque Nacional Joshua Tree queda cerca del Cañón y merece una visita según Fernando V. H. al ser un icónico referente de la cultura popular y por su riqueza paisajística

 

Parque Nacional del Valle de la Muerte

 

No nos dejemos asustar por su tan poco marketiniano nombre: el Valle de la Muerte es toda una singularidad paisajística pese a ser uno de los más extremos desiertos del mundo.

De una biodiversidad única para un clima desértico, el Valle de la Muerte es toda una curiosidad que también ha servido de escenario para múltiples películas y series, como es el caso de las diferentes trilogías de Star Wars.

 

Parque Nacional Joshua Tree

 

Famoso por acoger la portada (y el libreto) del que es el disco más conocido de la banda irlandesa U2, el Parque Nacional Joshua Tree es toda una curiosidad y se presta a más de una imagen con la que ilustrar nuestras redes sociales.

Si bien el desplazamiento único a la zona no es un imprescindible de una ruta por el Oeste Norteamericano, sí que es una excelente opción si nos desplazamos del Cañon hacia las Vegas – Los Ángeles.

 

Empresario del sector inmobiliario, aficionado a la inversión en criptomonedas y fiel seguidor del VRAC. Disfruto y aprendo con cada experiencia y así me gusta que se refleje en el blog de Fernando Vega Hernández